La cuestión de privilegio planteada contra Patricia De Ferrari Rueda derivó este miércoles en la suspensión por seis meses de la legisladora del bloque Juntos por el Cambio.
Como es sabido, el tratamiento tuvo lugar debido a una publicación llevada a cabo el pasado 22 de octubre en la red social Twitter por De Ferrari Rueda y que suscitó un amplio rechazo, no solo en la provincia sino también en el plano nacional. La solicitud llevó las firmas de las legisladoras Nadia Fernández, Graciela Manzanares, Victoria Busso, María Emilia Eslava, Tania Kyshakevych, Mariana Caserio, María Laura Labat, Liliana Abraham, Natalia Martínez, Adela Guirardelli y Carmen Suárez.
La petición se apoya en el artículo 129 del Reglamento Interno de la Legislatura, cuando señala en su inciso 1º que “se consideran Cuestiones de Privilegio” a “las que afectan los derechos de la Legislatura colectivamente, su seguridad, dignidad y la integridad de su actuación y sus procedimientos, considerados desde la perspectiva de órgano representativo de los ciudadanos”.
También halla fundamento en el artículo 99 de la Constitución de la Provincia de Córdoba, que afirma que “la Legislatura dicta su reglamento y puede, con el voto de los dos tercios de la totalidad de sus miembros, corregir, excluir de su seno a cualquiera de ellos por desorden de conducta en el ejercicio de sus funciones o por indignidad, y removerlo por inhabilidad física o psíquica sobreviniente a su incorporación”.
La fundamentación estuvo a cargo de la legisladora Nadia Fernández, quien dijo que “lejos de honrar la democracia, estas aseveraciones y las inadmisibles justificaciones que pretendió instalar la legisladora De Ferrari son una afrenta a esta casa, una afrenta a los legisladores y legisladoras que la integramos y representamos al pueblo cordobés, a esta provincia que está en los 200 años de que asumió su primer Gobernador constitucional”.
Fernández consideró además que “la legisladora De Ferrari ha incurrido en la causal de indignidad contemplada en al artículo 99 de la Constitución Provincial, ya que sus dichos son impropios de una representante legítimamente elegida por el voto popular”.
En su descargo, la legisladora De Ferrari Rueda manifestó que su tuit “resultó en una desafortunada analogía que fue interpretada en una manera que ofendió a muchos. Por esa razón pedí disculpas. Entiendo que se pueden sentir sinceramente ofendidos por esa desafortunada expresión”. Y agregó: “Si hay alguien a quien tengo que pedirle disculpas, no es solamente a la Cámara: es a quien puedo haber ofendido, sabiendo que no es lo que pienso, pero que le molestó mi expresión”.
De esta forma, durante los seis meses de suspensión De Ferrari Rueda quedará excluida del goce de sus haberes.
Asimismo, la legisladora no podrá ser autoridad de la Cámara ni de ninguna de las comisiones conformadas o que puedan conformarse por lo que reste de su mandato. También quedará excluida de representar al cuerpo en todo acto institucional.