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Se llevó a cabo la tercera jornada de donación de sangre en la Unicameral

En conjunto con el Banco de Sangre de la Provincia, este jueves se realizó una nueva colecta entre legisladores, empleados legislativos y voluntarios. Por cada donante, se salvan cuatro vidas.

“Es un ratito, no es ni mucho dolor ni mucha molestia. Muchas personas tienen miedo, pero hay que convencer y concientizar a la gente de donar sangre porque se salvan vidas”, dijo la legisladora Patricia Botta con un brazo al descubierto, ya lista para recibir el pinchazo. Es que este jueves, en la Legislatura cordobesa se concretó la tercera jornada de donación de sangre y la legisladora no dudó en acercarse. 

Se trata de una iniciativa impulsada por el legislador Ignacio Sala en conjunto con el Banco de Sangre de la Provincia. La misma se realiza cada 6 meses, por lo que está previsto que el próximo diciembre se lleve a cabo una nueva edición. 

“Es importante colaborar porque con cada donante se salvan cuatro vidas. Por eso, asumimos el compromiso de que funcionarios y toda la Unicameral se ponga a disposición de esta causa”, sostuvo Sala. Además, el legislador comentó que están coordinando para replicar esta jornada en el interior provincial y “seguir aportando granitos de arena”

Desde la 8 de la mañana hasta las 12 del mediodía, quienes se acercaron a donar fueron atendidos con mucha amabilidad por tres técnicas de hemoterapia y el médico Sebastián Conti en el Salón de Actividades Legislativas del edificio de Avenida Olmos. También estaba el representante del Incucai en Córdoba, Gabriel Conci, encargado de recibir las muestras de las personas que se sumaron al banco de donantes de médula ósea. 

Alrededor de 15 donantes fueron parte de esta jornada. Además de Botta y Sala, también se sumó el legislador Matías Chamorro.   

“Se ve el compromiso. En la primera éramos poquísimos, la segunda un poco más y ahora la gente viene sola y pregunta cuándo es la próxima. Ya no hay que andar arriándolos, aunque muchos le tienen miedo a la aguja”, contó Sala. Y confesó que él le tiene fobia, sin embargo se animó.  

Luego de la extracción, Botta expresó: “Es un acto altruista. Para qué nos vamos a guardar la sangre si la volvemos a regenerar y muchas personas la necesitan. Lo hago hasta 4 veces al año, ya participé de la jornada anterior y en diciembre volveré a estar sin dudas“.

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